Cuando hablamos de alineación y balanceo del vehículo nos concentramos específicamente en la parte de suspensión y dirección del sistema. Normalmente tiende a desgastarse por el mal estado del asfalto ya que al coger huecos va afectando negativamente esta estructura del automotor.
Identificamos que hay que hacer un mantenimiento correctivo de este tipo, al momento que al acelerar el vehículo superando cierta velocidad, se siente vibración en el piso o el timón vibra exageradamente. También se reconoce cuando manejamos en línea recta, pero el timón no está centrado y si soltamos la dirección por un instante el carro tiende a irse hacia un lado.
Si al pasar el tiempo dejamos el vehículo en este estado, puede generar desgaste irregular en las llantas; además estropea el funcionamiento al conducir produciendo el rápido agotamiento de la gasolina.
Te recomendamos realizar alineación y balanceo cada 10.000 kilómetros.